"La vida entera puede ser sugerida por el temblor de una hoja."
Federico Fellini

martes, 21 de octubre de 2008

Otras formas de la guerra y la paz

Después de una encendida polémica idiomática (ver los comentarios de la entrada Giro de Tango), hoy recibí una colaboración extraordinaria del excelente y generoso poeta valenciano Pere Bessó, con la traducción de varios de los poemas de Jorge Paolantonio, publicados en español por Artesanías Literarias.

CLAVE PARA ABRIR LAS PAJARERAS
Jorge Paolantonio / 08/09/2008

De libro Favor del Viento, Ediciones Sarquís.

-Ediciones de la Juglaría, Córdoba, 1973-1968-1972

Essencial

Jo li done temps

al temps,

el pose en l’ampolla dels meus dits,

el mesure amb la fartada dels meus ulls

i el traduesc en sexe

(per a agredir les veus

prou amb el silenci).


Esencial

Yo le doy tiempo

al tiempo,

lo pongo en la redoma de mis dedos,

lo mido con la hartura de mis ojos

y lo traduzco en sexo

(para agredir las voces

basta el silencio).


(leer más)

lunes, 13 de octubre de 2008

Poética tanguera

Hay una frontera que separa la biblioteca del resto de la casa donde a veces se escucha música. El tango por ejemplo, otra escritura. Quiero saltar la línea divisoria y bailar libros, suceder tango en el texto, escarbar un orden en el desorden alfabético y mezclar a Piazzola con Pizzarnick. Y, buscando fuentes y razones que me justifiquen, encontré esto:

“En sus orígenes, (al tango) no se lo cantaba; incluso no había instrumentos: solo el repiqueteo de los zapatos en los adoquines y el sonido de las dagas que se cruzaban en cada ‘corte'. “La danza misma ofrece como la síntesis última del duelo criollo y el acto sexual… La herencia aquí es una herencia de significantes en tanto que semblantes; los que anteriormente identificaban al duelo y componían su silueta, se traspasaron luego al tango danza: marcar al adversario o a la pareja; la asentada para detener un golpe o para volcar a la compañera sobre el cuerpo inclinado del varón; el corte del cuchillo o la daga que se transmuta en un corte en el ritmo… casi todos los pasos del tango son herederos de los movimientos internos del duelo criollo: la quebrada, el volteo, el ocho, la media luna, la parada, el cruzado, la rueda, el paso de lado o con golpe, el corte, el paso atrás, la embestida, el abanico, el medio corto y las cuerpeadas … siempre se avanza hacia delante, avasallando.

Antonio Ferrero[1].

¿Entonces, se trataba de un duelo? ¿Música o danza como formas de una civilización que es barbarie? ¿La cultura alfabetizada, la biblioteca con capa y espada, o poncho, alpargata y cuchillo? Se dice que una razón dramática abarcaría todos los lenguajes y se expresaría en la literatura, la música y la danza como matriz de la cultura que identificamos como propia. Acaso no bailamos, sino que actuamos una guerra... ¿Un esquema heredado, no consciente, nos impone la lucha o la adhesión a la lucha que emprenden otros? Y sí. Puede ser que la pareja que baila, tanto como los lectores y los espectadores, actuemos ese modelo invariable, impulsados por la máquina de miedo delimitada por la frontera que nos separa a unos de otros. O quizás el lenguaje nos obligue a ser rótulos de un relato que nos define, confrontándonos. Debemos aceptar los símbolos, dice Pavese... Por mi parte bailo tango, escribo, leo. Una misma corriente me pone en distintos escenarios a los que emigro como una extranjera para buscar la tierra incógnita que llaman cultura. Los libros y la danza. La música. Lo que no me pertenece. La escena de los rivales enfrentados que aparentemente se superpone al placer del entendimiento, la comunicación, la risa, el abrazo. La guerra que nos parió. Y yo, que pensaba que era el amor...Pero esos ajenos enfrentados, al fin, también son mi familia.

sábado, 11 de octubre de 2008

Más sobre la "creación" del desierto

"Ocurrió en Los Toldos, provincia de Buenos Aires, donde los mapuches hicieron un encuentro con el bello nombre de “Caminata por la defensa de todas las vidas”. ......"Se leyó una página de Verónica Azpiroz Cleñan, donde describe lo que era esa región antes y lo que es ahora. Después detalló ...
sigue acá


(fragmento tomado de una nota de Osvaldo Bayer: leer completa)

jueves, 9 de octubre de 2008

Otra "Campaña al desierto" que desertifica

Sobre el tema del campo recibí una nota realmente esclarecedora del valenciano Vicent Boix. (Gracias, Vicent, en medio de tanta cháchara de gente que habla por hablar, su trabajo de indagación del problema del campo no solo en Valencia sino también en Nicaragua y otras partes de América Latina son como agua fresca...) La nota se titula "EL AGRICULTOR EN PELIGRO DE EXTINCIÓN". El trabajo narra la tragedia del campo citrícola valenciano, las causas, las consecuencias, etc. También indaga en la crisis de los precios de los alimentos que vivimos meses atrás. Puede parecer una temática muy local, pero el patrón de la debacle es similar en otras partes del mundo. Se puede descargar más información en el siguiente enlace:
http://www.elparquedelashamacas.org/html/biografia.html (Está en HTML y en PDF)
El desalojo de tierras (esta vez, en Argentina, les toca también a los "blancos") es otra campaña al desierto, ahora globalizada.


domingo, 5 de octubre de 2008

Fin de semana; ¿un cuento para niños?

Escribí este cuento y ahora dudo: ¿No será para grandes más que para chicos? Lo copio acá a ver si alguien quiere ponerlo a prueba...
FIN DE SEMANA
-Buen día, niños... -Buenos días, señorita.
Así comienzan los días de clase en casi todas las escuelas del país, salvo en las nocturnas. Pero en la clase de la maestra Carmen las cosas empiezan de otro modo.

-A ver... Santiago, ven al frente. Hoy contarán qué han hecho durante el fin de semana y con eso pasaremos la primera hora. Comienza: ¿qué hiciste este fin de semana? -¿El fin de semana? ¿Yo? -Sí. -El fin de semana ha sido como siempre, ocasión para el descanso y el encuentro de la familia. -¿Dónde se encontraron? -En la casa de mi tía Felisa, la que tiene bigotes. -¿Tu papá, fue? -No, él no se encontró. Pero mi mamá, sí-. Continúo. La calle estaba llena de agua debido a la lluvia. -¿Por qué hablas con elle? ¿Acaso no sabes que en nuestro medio se emplea el sonido ye como elle, y está mejor visto decir caye que calle? -En mi casa me tienen prohibido hablar mal. Mi mamá es maestra y mi abuela también. -Bueno, son maestras de antes, querido Manuel... -Yo no soy Manuel Zaldivar. Manuel es mi hermano. -Cierto, Manuel era tu hermano. -Es, sigue estando, pero ahora en tercer grado. -Bueno, continúa con la visita. -En la casa de mi tía Felisa fuimos recibidos con café con leche y factura. Yo no quería medialunas sino tortitas negras. No había y me enojé, pero no dije nada porque éramos invitados y teníamos que demostrar buena educación. Mi mamá, en cambio, se avivó y... (sigue acá)

viernes, 3 de octubre de 2008

Escombro inmobiliario

En el mundo de conciencia global hay una inconsciencia particular: la casa, la guarida, el refugio, el pecho que nos cobija y el abrazo que nos retiene.
Precisamente, las inmobiliarias encontraron un nicho, un nido, en el espanto de la intemperie y la nostalgia del agua mater. Pero en este momento el mundo parece sacudir el cemento y amenaza con repartir escombros. Me atrevo a copiar acá el final de La Vecina del río, el poema donde dialogo con las inmobiliarias que hicieron de la costa de mi infancia un paredón de basura. Copio el fin del poema, me divierte haber soñado una rebelión de las aguas:

Del hueco del no ser, estando
puede brotar la masa ígnea del centro de la Tierra
que hace bullir al océano en las profundidades (dicen).
Del hueco, del vacío, los biguás
enfrentando
el aire del oeste
regresarán
a planear sobre el río.
Hasta que un mundo
de otro mundo
inunde al desolado
escardando los yuyos de las inmobiliarias
y carpiendo la tierra
para quitar raíces, capital, intereses
al tirar de la red
que arrastran los caballos, en la playa desierta